En medio de casi dos mil páginas de registros públicos muy tachados, el Distrito Escolar del Condado Clark (CCSD) dio a conocer su más reciente código de conducta para el departamento de policía del distrito, mostrando las consecuencias que enfrentan los agentes por violarlo.
El documento de nueve páginas contiene una matriz de infracciones, junto con sus correspondientes sanciones.
La Asociación de Oficiales de Policía del CCSD colabora con el departamento para establecer este código de conducta, dijo Adam Levine, consejero general de la asociación.
La asociación, el sindicato del departamento de policía del CCSD, ha negociado una “política de disciplina progresiva” para cuando los agentes violan el código, dijo Levine.
Hay siete clases de sanciones. Si una infracción se clasifica como 1, un agente que la cometa por primera vez puede esperar recibir una advertencia oral. Pero si la infracción se clasifica como 7, el agente puede esperar el despido inmediato.
Algunas infracciones punibles son sencillas, como usar voluntariamente una droga ilegal o estar implicado en un delito grave. Otros, como la pertenencia, afiliación o activismo en grupos subversivos o sus principios, no son tan sencillos.
Algunos cambios aún en curso
Levine explicó que, aunque el sindicato ha dado su visto bueno a la mayor parte del código de conducta, todavía se están elaborando algunas cláusulas.
“Chicos, ¿qué es un grupo subversivo?”, reflexionó. “Tenemos que arreglar eso”.
Pero algunas infracciones no han sido objeto de conversación en torno al cambio del código.
En la versión actual del código, que entró en vigor en diciembre de 2020, usar prejuicios o perfiles raciales en el desempeño de las funciones policiales tiene un rango de sanción de 4 a 7.
Esto significa que, en la primera infracción, dependiendo de la gravedad, un agente puede recibir una amonestación por escrito. Según el cuadro de sanciones, esta infracción no alcanza el nivel de despido hasta la tercera vez que el agente usa prejuicios o perfiles raciales.
Levine, que señaló que este rango se eligió antes de que él se involucrara en el sindicato, dijo que esta cláusula “simplemente ha estado ahí desde siempre”.
“Alguien, hace mucho tiempo, simplemente pensó que esto es lo que debía ser”, dijo.
Desde que se afilió al sindicato, Levine afirma que nunca ha visto a ningún agente cometer esta infracción. Y como no ha habido ningún ejemplo, “nunca lo hemos analizado para ver si es apropiado”, explicó.
El teniente Bryan Zink, del Departamento de Policía del Distrito Escolar del Condado Clark, dijo que, aunque la tabla de sanciones se divide en primera, segunda y tercera infracción, la clasificación también depende de la gravedad de la infracción.
“Puede ser una ofensa 1 y puede ser una 7”, dijo Zink.
Parte de la política de disciplina progresiva consiste en que los agentes reciban una sanción que, de alguna manera, corrija su comportamiento. Zink explicó que puede tratarse de capacitación o asesoramiento.
Pero si alguien cometió una infracción la primera vez, recibió capacitación y luego volvió a hacerlo, “Sí, tienes un problema con ese agente”, dijo.
Gama de clasificaciones
Algunos delitos, como el uso excesivo de la fuerza, tienen una amplia gama de clasificaciones: de 1 a 7.
Zink dijo que ayuda pensar en un delito como en una ley. “Las diferentes leyes tienen diferentes grados de criminalidad”, dijo.
Si una infracción tiene una amplia gama de posibles sanciones, la gravedad de la infracción, el número de veces que el agente ha cometido la infracción y si el agente fue veraz o no al respecto son factores que se tendrán en cuenta, explicó Zink.
Dijo que las quejas sobre una posible violación del código de conducta pueden provenir de reportes de ciudadanos, de la observación de un supervisor o de una revisión de las grabaciones de las cámaras corporales. A continuación, las denuncias son investigadas por un comité de asuntos internos.
Algunas infracciones tienen un alcance más limitado. Por ejemplo, que un agente hable de forma crítica de la nacionalidad, el color, el sexo o las creencias de alguien conlleva una sanción de las clases 3 a 5.
Zink explicó que el motivo de que esta infracción no sea inmediatamente sancionable con el despido es que el departamento “espera que seamos capaces de manejarla mediante la reeducación”.
También subrayó que tener este tipo de queja en la carpeta de un agente sería “devastador para una carrera policial”.
Según el código de conducta, si un agente no vuelve a cometer una infracción en el plazo de tres años, si vuelve a hacerlo se “considerará una primera infracción a efectos disciplinarios”.
Levine se refirió a esta política como purga, aunque algunas sanciones no pueden purgarse. Por ejemplo, si un agente es degradado o despedido, esto no cambiará después de tres años.
Pero una advertencia oral, una amonestación escrita o una suspensión podrían eliminarse del expediente de un agente.
“Sería como hacer borrón y cuenta nueva”, dijo Zink. “Una vez que está fuera del expediente, está fuera del expediente”.
Añadió que el código de conducta de la policía del CCSD evoluciona con una sociedad cambiante. Cuando entra en vigor una nueva ley que protege a una clase de personas o ataca la intimidación y el acoso, el código se actualiza.
“Desde su creación en 1989, el Código de Conducta del Departamento de Policía del CCSD ha evolucionado para satisfacer las necesidades actuales y futuras. Los cambios en los Estatutos Revisados de Nevada, la negociación colectiva del sindicato de empleados, los reglamentos del Distrito Escolar del Condado Clark, la jurisprudencia y las mejores prácticas se incorporan a medida que se desarrollan”, dijo un portavoz del CCSD.
Si el código cambia, cada agente recibe una nueva copia para revisar y firmar, según Zink.
“Realmente no pueden decir: ‘Bueno, yo no estaba al tanto’”, dijo.
